Unión a Ella

Y es que ella está atada a mi corazón

Nunca la soltaré, más me une el cordón

Afectividad física no le nace, no sé por qué
Pero lo que ella hace, me demuestra su gran querer.

Y es que mi mamá forma parte de mí.
No es que la quiero, la amo a morir.

Es ella la luz de mi oscuridad
Me muero, me asfixio si me llegara a faltar

Con gran sencillez se ha de postrar
en mil corazones que la han de admirar

Mi súper mamá no es nada normal
Mi súper mamá es algo especial.

Doy Gracias al cielo, sólo gracias yo doy, por si algún día ella peligre, sólo eso le pida a Dios.
No me la alejes, no me la alejes; todos los días he de clamar

No me la alejes, te lo suplico, a los cielos he de rogar.

Tiene ése toque tan personal
Tiene un buen gusto, tan peculiar

Es muy distinta, nada normal
Mi mamá gallina ¡sí me ha de cuidar!

Como una muñeca me ha de guardar
De porcelana, rizos de oro, sonrisa fingida, cuerpo inerte.
La muñeca se quiere romper, en un pedestal la han de tener
Siempre la observa, la muñeca no puede escapar
La entiende, la quiere pero, tiene que respirar.
¿Cómo ésta muñeca se hará de verdad si su gran guardiana no la deja volar?

“¡Irresponsable, inocente, infantil y descuidada,
el mundo te ha de comer de tan sólo un paso en la calle que des!
Yo soy tu guardiana, te asignaron a mí
Tú eres mi muñeca, por tí he de morir”

Desesperación, tan fuerte el control.
No se le puede mirar, no se le puede tocar,
no puede vivir, de mentira ha de existir.

La historia de la muñeca ni ha de empezar
No vive ni siente, aún de plástico permanecerá.
Algún día de éstos sé que ella caerá
En un abrir y cerrar de ojos, la muñeca,
como Pinocho, será de verdad.

La amo y sin ella no sabría vivir pero, ¡espera! Una guerra se ha formado aquí.

Independiente, tan fuerte, nacida para reinar
Esta muñeca se exige nadie ha de controlar
Ni su mami, ni el mundo, nadie a su alrededor.
Ella marca sus pasos, sólo ella tiene el control.

Independiente, divertida, su corazón han de asfixiar cuando su libertad se le es prohibida, tan sólo quiere gritar.

Tan fuerte la guerra, se unen las dos, entre lágrimas y penas, se refugian en Dios.

Yo amo a mi madre, a todo su ser
Me duele la ira que en mí ha de crecer
Atenta a mi vida, a mi existir
Mi amor se marchita porque no lo puedo permitir

Tan fuerte el lazo,
tan semejante el parecido
Tan grandes coincidencias,
tan especial, tan único, tan gran amor mío.

Yo sé que ése lazo nunca se habrá de romper
Pero ahora te declaro la guerra mujer.

Tranquila, advertencia, no ha de empezar
Cuidado, no me cuides, ya he de explotar

No te olvides de la cosa que te dije yo a ti, que fuertemente estoy Unida a Ti

Y el día que tú dejes de en este mundo respirar,
yo te juro, mi corazón se habrá de parar.
Unida a Ti.
Sin rencor, siempre… Estoy, Unida a Ti.